Cuando una es de tierra adentro
también es de cielo afuera.
Si viene pa Buenos Aires
un calabozo la espera
y pregunta dónde está
el cielo de la ciudá.
Señora dueña de casa
perdone el atrevimiento:
al pájaro en jaula de oro
lo madura el sentimiento
de ponerse a curiosear
la tierra y también el mar.
Sé que ustedes pensarán
qué pretenciosa es la Juana,
cuando tiene techo y pan
también quiere la ventana.
Soy como soy,
miro un poquito y después me voy.
Yo vivo en un cuadradito
de oscuridad recortada,
con un corazón de vidrio
por donde no se ve nada.
Présteme el televisor
que se ve más y mejor.
Por esa ventana ajena
es propio lo que uno mira.
Está abierta al mundo entero
aunque sea de mentira,
y mi único balcón
es ver la televisión.
3 comentarios:
Cuando muchos, muchísimos, se escandalizaban porque 'los pobres' no tenían casa propia pero sí televisor, la incomparable María Elena Walsh escribía esta poesía.
He leído poemas mejores en un envoltorio de chicles.
2 cosas al del envoltorio de chicles: primero, esa maldita costumbre de buscar 'el mejor'! María Elena dijo lo suyo y eso es todo; segundo, seguí mascando chicle, vas a engordar menos que con el chocolate o no te agarra cáncer como con el cigarrillo, y sé feliz
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